Dependiendo de la presión y el calor durante su formación, cada cuarzo obtiene un color.
• El cuarzo blanco está relacionado con la purificación y la limpieza de las energías. En lo personal, su poder nos permite deshacernos de la negatividad, se usa para combatir el estrés y el cansancio. La forma más común de usar el cuarzo blanco es en la meditación, ya que permite hacer limpieza de cuerpo, alma y mente.
• El cuarzo rosa se considera la piedra del corazón, se utiliza para fortalecer el cuarto chakra que se asocia con los sentimientos hacia los demás y la apertura a la vida. Así, el cuarzo rosa conecta con la paz interior y favorece la realización personal, aumentando la autoestima y la confianza, permite también liberar emociones reprimidas en el corazón.
• El cuarzo azul se conoce como la piedra de la relajación y la calma, está asociada con el quinto chakra, el chakra de la garganta. Con esta piedra podrás relajarte, concentrarte y comunicarte con mayor facilidad.
• La amatista potencia la motivación, la concentración, el equilibrio y la memoria. Favorece la relajación y ayuda a bloquear el estrés, aportando claridad para equilibrar el cuerpo y la mente.
• El ágata se considera una piedra preciosa de energía suave y es conocida por aportar armonía y equilibrio. Atrae el balance en la vida y la confianza en uno mismo. El ágata también tiene propiedades de protección cuando es ligeramente oscura.