El objetivo: levantarte, ir al armario y no pensar qué ponerte porque está todo bien organizado. El secreto para que el orden dure: te lo contamos a continuación. ¡Descúbrelo!.
Marta Sanz
Periodista especializada en decoración
¿Estás decidida a organizar un armario para toda la semana? La clave es crear los looks: por un lado los looks de trabajo, por otro los de fin de semana. La mayoría de nosotros nos vestimos diferente cuando vamos a trabajar de cuando estamos disfrutando de nuestro tiempo de ocio. Si separas la ropa de diario de la del fin de semana, tu día a día será más sencillo.
Si no es así, si usas la misma ropa, no desestimes esta recomendación: elige 5 conjuntos, uno para cada día de la semana, y déjalos preparados y ordenados en tu armario. De lunes a viernes, de izquierda a derecha
PARA QUE ESTE SISTEMA FUNCIONE...
La organizadora profesional Vanesa Travieso nos ayuda a crear la mejor estructura: Necesitas más barras y cajones que baldas. El máximo de barras posibles: la ropa colgada es más fácil de ver y no se arruga.
Las baldas es mejor que sean solo para zapatos, bolsos y jerséis.
1. LA ROPA DE FIN DE SEMANA, EN DOS CLASES
Antes de organizar el segundo cuerpo del armario, separa la ropa cómoda de la de vestir. La primera (camisetas, sudaderas…) puede estar doblada en los cajones. Es mucho mejor reserva la barra para las chaquetas y la ropa de fiesta, suelen ser piezas más delicadas y te lo agradecerán..
2. LOS ACCESORIOS, TODOS JUNTOS
Bolsos, zapatos, cinturones…son las piezas que más se desordenan. Si les puedes dedicar un sitio exclusivo, donde estén todas juntas y a la vistas tendrás mucho ganado. Bueno, todas todas no es necesario, las que usas habitualmente, las de uso excepcional o fuera de temporada (las chancletas, por ejemplo) pueden ir en cajas.
Los organizadores de zapatos en cuña te harán ahorrar el 50% del espacio y te permitirán verlos (especialmente si son transparentes como estos) y cogerlos fácilmente.
4. CREA CAJONES ESTACIONALES
Tener en un solo cajón todos los complementos de temporada te simplificará muchísimo la vida en general y el cambio de armario en particular. Todos ellos pasarán directos del cajón a una caja con su etiqueta correspondiente. ¡Y viceversa! Fíjate como cambia este mismo cajón en la siguiente foto, con exactamente la misma distribución, con el cambio de temporada.
5. CON ORGANIZADORES: MUY MUY FÁCIL
Donde antes estaban los pareos ahora viven las bufandas. Las cosas para la piscina dejan paso a los gorros… Inspírate en este cajón y crea tu propio cajón estacional. Eso sí, asegúrate que incluya cosas que solo necesitas de año en año, de verano a invierno. Los organizadores fáciles de adaptar y son económicos, en su defecto, puedes usar cajas de diferentes tamaños, al más puro estilo Marie Kondo.
6. EL GRAN RETO DE LOS BOLSOS: 3 SOLUCIONES
Después de los zapatos, los bolsos son los complementos que más espacio ocupan y más dolores de cabeza nos dan. Las baldas superiores son su lugar natural en el armario. Un sitio perfecto para los modelos compactos que se tienen bien de pie. Pero cuidado con los de piel blanda: debes rellenarlos para mantener su forma, con papel de periódico, por ejemplo.
7. PLAN B: BOLSOS COLGADOS EN LA PUERTA
Esto sí que es sacarle partido al espacio. Esta banda con velcros se adapta a todas las medidas de bolsos y puertas. Solo un pero: algunos bolsos no llevan muy bien lo de estar colgados. Cuida que los más grandes no arruguen la ropa cuando cierras el armario.
8. PLAN C: UN ORGANIZADOR DE BOLSOS
Colgarlos de la barra en un organizador es buena opción: están más a mano que en las baldas de arriba y aprovechan el espacio. Fíjate, en el sitio de 2 o 3 perchas caben 6 bolsos, igual que en todo el estante. Eso sí, ojo con las deformaciones.
9. CÓMO ELEGIR BIEN LAS PERCHAS
Parece un tema menor, pero elegirlas bien te permite cuidar tus prendas como se merecen, ocupar menos espacio y ordenarlas por clases. Buenos consejos: evita las de alambre (incluso para la ropa de la próxima temporada), que sean iguales, que no resbale la ropa, que sean redondeadas y un poco anchas para que la ropa no se deforme, pero tampoco demasiado para que no quiten mucho espacio.
10. UN GALÁN CON LA ROPA DEL DÍA SIGUIENTE
Si no te atreves (o no tienes espacio) para llevar a cabo nuestro plan de ropa semanal, dejar lista al menos la ropa que te vas a poner el día siguiente te hará las mañanas más fáciles. Pero si no consigues establecer la rutina y el galán acaba siendo un rincón donde va a parar la ropa que te has puesto, olvídalo. Fija un sitio en tu armario o un colgador para dejarla con su percha.
Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.casawow.com.co,