Un trío de mesas cumplen la función de mesa de centro en este salón donde los tonos tejas y la madera destacan sobre una base blanca. Redondas, bajas, de distinto tamaño y de madera de teca pueden ir juntas o por separado y dan al salón un aire más desenfadado. Este tipo de mesas son perfectas en salones pequeños: al ser redondas no ocupan tanto espacio y puedes jugar con su ubicación y convertirlas en mesas auxiliares. Y también son muy prácticas en casas con niños. Al no tener esquinas si se golpean no se hacen daño. Además, por su altura les pueden ir bien para dibujar.