Beneficios de ducharse por la noche
La mayoría de expertos se decantan por pasarse un agua por las noches. En el artículo de The New York Times, la doctora Kennedy explica que «en sincronía con los ritmos circadianos (los cambios físicos, mentales y de conducta que siguen un ciclo diario, y que responden, en gran medida, a la luz y la oscuridad en el ambiente de un organismo), el cuerpo tiende a enfriarse de forma natural por la noche a medida que se acerca nuestra hora de dormir. Al ducharnos, contribuimos a elevar de forma artificial nuestra temperatura corporal lo que ayuda a un enfriamiento más acelerado que estimula el sueño».
Por lo tanto, según esta profesional, un baño por la noche nos ayuda a relajar nuestro cuerpo, a liberar la tensión muscular y a conciliar mejor el sueño. Lo mismo opinan desde la Sociedad Española del Sueño. Para ellos, asociar baño nocturno con un buen sueño es lo habitual en nuestra cultura. De hecho, desde siempre, los adultos siempre bañamos a los niños por la noche para que vayan mejor a la cama. Y si se sigue haciendo así será porque funciona.